miércoles, 22 de abril de 2015

La tradición oral y Gutenberg


La imprenta moderna, creada aproximadamente en el año 1440, permitió transmitir lineal y jerárquicamente el pensamiento humano por medio de la escritura.  Antes de pasar a la era de Johannes Gutenberg,  transmitíamos nuestros discursos de forma oral en el mismo contexto que se producían. Estas sociedades de tradición oral  transmitían de boca en boca, de generación en generación, y eran  totalmente independientes de estructuras y soportes. Esta última característica  les ofrecía plena libertad para adaptarse a cualquier situación añadiendo o quitando contenido.
El modelo cultural de occidente ha estado basado por más de 500 años en el libro.  A pesar de esto, no podemos considerar que las culturas orales han sido suplantadas por el libro porque lo escrito no deja de ser un mero e “incompleto” complemento. 

“Las lenguas están hechas para ser habladas, la escritura sólo sirve de complemento a la palabra; si existen lenguas que sólo son escritas y que no se puedan hablar, aptas sólo para las ciencias, no son de utilidad en la vida civil”
Rousseau, Emili, citado per Derrida, J. (1967), De la grammatologie. París, Ed. de Minuit, pág. 429). 

¿Por qué incompleto? Porque el pensamiento humano es complejo, no tiene limitaciones, y no se puede transmitir de forma lineal.